Entre las rapaces de nuestra fauna, el Azor Común y el Halcón Común son temibles y feroces cazadores. El Azor Común, maestro en el ataque por sorpresa, se revela especialmente rápido y preciso. Por otro lado, su morfología se presta bien a esta técnica de caza. Su talla y su potencia le permiten capturar especies de tamaño medio, y su larga cola constituye un timón muy eficaz para efectuar bruscos cambios de rumbo cuando persigue a sus víctimas por el aire.
Huésped de los grandes macizos forestales, establece sus terrenos de caza en los linderos, en los amplios calveros y en los campos salpicados de setos. Emboscado en una rama – su discreta librea le asegura un excelente camuflaje –, espera pacientemente que una presa se mueva en la vecindad. Llegado el momento, abandona su retiro y se lanza sobre su víctima antes de que ésta tenga tiempo de huir.
Sin embargo, contribuye a limitar el número de Arrendajos, Urracas, Cuervos y Palomas, sus presas favoritas.
Por su especial facilidad para la caza en terrenos boscosos, el Azor Común ha sido desde antiguo una de las rapaces favoritas de los cetreros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario